Diego Lagomarsino, el colaborador informático de la Unidad Fiscal Especial AMIA, fue imputado por "haberle facilitado el arma" al fiscal Alberto Nisman. Sería la pistola Bersa calibre 22 que terminó con la vida del funcionario público el pasado domingo 18 de enero y que fue hallada junto a su cadáver.
Lagomarsino fue imputado bajo la figura que contempla el artículo 189 bis, apartado 4, del Código Penal. "Será reprimido con prisión de un año a seis años el que entregare un arma de fuego por cualquier título a quien no acreditare su condición de legítimo usuario", reza el citado artículo.
En un comunicado difundido esta tarde, la fiscal Viviana Fein informó que está "evaluando las pruebas recolectadas y los testimonios para saber hasta dónde podría extenderse la imputación" contra Lagomarsino.
Por otro lado, la fiscal que investiga la muerte de Nisman indicó que comenzó el trabajo de "análisis de todos los registros de video de las cámaras de seguridad del complejo Le Parc de Puerto Madero". Luego de haber notado "falencias" en los registros de ingreso y egreso del edificio donde vivía y fue hallado muerto Nisman, Fein ordenó "un análisis profundo de las imágenes".
Al mismo tiempo, la División Apoyo Tecnológico de la Policía Federal asiste a Fein en el "análisis de todo el material incautado", que incluye "celulares y líneas incorporadas a la investigación".
En tanto, Fein aseguró estar a la espera de los resultados de los estudios de ADN ordenados sobre "el material balístico levantado en el departamento" la noche del deceso de Nisman. Todas las pruebas recogidas se "resguardaron en un sitio de máxima seguridad" para mantener su "asepsia".