En una puesta en escena donde se la vio de impecable blanco y subida a una silla de ruedas, la presidenta anunció por cadena nacional que enviará un proyecto de ley "de reforma del sistema de Inteligencia argentino". Enredos y mentiras que no se deben dejar pasar.
A una semana de la muerte del fiscal Alberto Nisman, y luego de que el oficialismo apuntara a ex agentes de inteligencia de maniobras contra el Gobierno, la presidenta Cristina Kirchner anunció que impulsará un proyecto de ley para disolver la Secretaría de Inteligencia (SI), más conocida como ex SIDE.
Dijo que su gobierno fue el único que enjuició a los genocidas de la dictadura militar, una mentira flagrante ya que durante el gobierno de Raúl Alfonsín se los llevó a juicio, se los condenó a cadena perpetua y su compañero, el justicialista Carlos Menem, los indultó durante su presidencia.
En una cadena nacional de una hora de duración que se grabó en la quinta de Olivos, la Presidenta apuntó contra Diego Lagomarsino (el colaborador de Nisman dueño del arma mortal) por la muerte del fiscal, defendió el accionar de su Gobierno en la causa AMIA, atacó a los medios de comunicación y dijo que ex agentes de la SIDE promovieron "todo tipo de denuncias judiciales" contra su persona.
La iniciativa será de disolver la ex SIDE que actuó de manera criminal y prejjuiciosa durante la última dictadura militar argentina, fue remitida al Congreso antes del viaje de la mandataria a China, en los primeros días de febrero y para su tratamiento, la Presidente dictó un decreto para llamar a sesiones extraordinarias. Lo hace en el último año luego de 12 años de gobierno sumando los 8 de Cristina y 4 de Néstor. Durante su mensaje, explicó que tomó la decisión de disolver la SI porque el Gobierno notó "desde 2013", cuando se firmó el memorándum con Irán, un "bombardeo" contra ese acuerdo y, desde allí, la "intensificación de una serie de denuncias contra esta Presidente de la manera más insólita".
La mandataria precisó que la nueva repartición será conducida por un director general y un subdirector que serán designados por el Poder Ejecutivo, pero cuyas designaciones "requerirán del acuerdo del Senado".
"Se sucedieron con un ritmo de vértigo -con la complicidad de fiscales, jueces y periodistas amplificadores de estas cosas, medios de desinformación- denuncias de todo tipo", sostuvo al respecto, y agregó: "Cuentas en lugares exóticos, empresas en Nevada, lugares donde habría montañas de euros y dólares, denuncias como nunca se vieron en la etapa de la democracia". Luego, reiteró que estos supuestos ataques se dieron "a partir del memorándum de entendimiento con Irán".
Según la Presidenta, la ex SIDE "evidentemente no ha servido a los intereses nacionales". "La disolución de la SI es una deuda de la democracia que me toca a mi reformar. Hemos visto una suerte de calesita permenate de fiscales, jueces y medios de comunicación que evidentemente ha quedado al descubierto y que hay que cortar de cuajo", dijo Cristina Kirchner.
La Presidenta impulsa la creación de un nuevo organismo, la "Agencia Federal de Inteligencia" que estaría a cargo de un director y subdierector postulados por el Poder Ejecutivo con acuerdo del Senado.
Además, Cristina anunció la decisión de "transferir la totalidad del sistema judicial de escuchas al Ministerio Público Fiscal", al considerar que se trata de "el único ministerio extrapoder".
La Presidente descalificó la denuncia en su contra presentada por Nisman por encubrir a los autores del atentado a la AMIA y la calificó de "absurda". En la misma línea de otros funcionarios judiciales, sostuvo que el escrito que Nisman elevó al juez Ariel Lijo "no pudo ser escrito por un abogado o un fiscal".
"No hay un solo abogado, un solo doctrinario, un solo magistrado, que una vez que se conoció la denuncia que pueda creer que haya sido escrito por un abogado y mucho menos por un fiscal", aseveró al respecto. A lo largo de todo su mensaje, Cristina Kirchner dijo una y otra vez que el kirchnerismo fue el que "más hizo" por esclarecer el atentado a la AMIA.
"Es descabellado desde lo político pensar que nuestro gobierno, que ha sido fundamental en la lucha contra el terrorismo, pueda siquiera ser sospechado" de una maniobra de encubrimiento.
Sospechas contra Lagomarsino
Al referirse al deceso de Nisman, la mandataria puso en el ojo de la tormenta a Diego Lagomarsino, el colaborar informático que fue imputado por haberle facilitado al fiscal la pistola Bersa calibre 22 que terminó con su vida. Además, hizo una relación entre Lagomarsino y el Grupo Clarín.
"Esta persona (Lagomarsino) es un feroz opositor al Gobierno, pudimos ver en su Twitter las groserías, esos insultos dirigidos a la persona de la Presidente de la República". A continuación, afirmó que el hermano de Lagomarsino es "un integrante del Estudio Sáenz Valiente, socio del Grupo Clarín".
Diego Lagomarsino, imputado por haberle dado el arma a Nisman. Fue puesto en el centro de la escena por la Presidente
Cómo se enteró la Presidente de la muerte de Nisman
Fue la ministra de Seguridad, María Cecilia Rodríguez, la encargada de notificar a la mandataria de lo ocurrido el trágico domingo 18 de enero con Nisman. Primero, a las 0.30 del lunes, Rodríguez llamó a Cristina Kirchner para decirle que había ocurrido un "incidente en el departamento de Nisman".
"Pensé que era un chiste, le dije 'me estás tomando el pelo'", fue la respuesta de la Presidente al inesperado llamado de la ministra de Seguridad. "Recién dos y media, tres de la mañana, me enteré de la muerte", reveló la mandataria.
La jefa del Estado apeló al lenguaje popular y dijo que se trata del sistema utilizado "cuando se pinchan los teléfonos por orden judicial", conocido en la jerga de Inteligencia como "Ojota", que, según su propuesta, quedaría en manos de la Procuradora General Alejandra Gils Carbó.
En su argumentación, Cristina hizo una férrea defensa de la actuación del kirchnerismo en la causa AMIA. Y, sin nombrar al desplazado Jaime Stiusso, apuntó a ex agentes de inteligencia de promover "desde adentro de las oficinas del Gobierno" denuncias penales contra su persona.
Cristina Kirchner también dedicó una parte de su discurso a Canicoba Corral. Destacó que el juez, a cargo de la causa AMIA declaró que "no era inconstitucional" el memorándum firmado con Irán. Pero, lamentó la Presidente, "la decisión fue apelada por Nisman y la cámara de alzada lo declaró inconstitucional". Canicoba Corral es un magistrado allegado al Gobierno, que está a la espera de que el Senado apruebe la designación como juez de uno de sus hijos.
Si bien la mandataria se había mostrado en un acto en Olivos el 14 de enero y se había referido a la muerte del fiscal Alberto Nisman en las redes sociales, la última vez que habló en público fue el 22 de diciembre pasado. Ese día, la jefa de Estado tuvo una agenda cargada. Cerró la jornada con un brindis con legisladores nacionales en los Salones Eva Perón y Científicos Argentinos del Bicentenario de la Casa de Gobierno. Durante su discurso, lanzó críticas contra los medios por cómo trataban el caso de la muerte del financista Mariano Benedit.
Cuatro días después de ese acto, Cristina Kirchner tuvo que retornar a Buenos Aires de manera imprevista, tras sufrir una fractura en su tobillo izquierdo, producto de un accidente doméstico en Santa Cruz, adonde había viajado por las fiestas de fin de año. A partir de allí, la Presidente guardó reposo y su actividad oficial se limitó a reuniones con funcionarios del Gabinete. Su reaparición –pero sin hablar– fue el mencionado acto en Olivos del 14 de enero. En la residencia presidencial firmó un convenio con la industria vitivinícola. Ese mismo día se había conocido la denuncia del fiscal Alberto Nisman contra el Gobierno por encubrir a los iraníes acusados del ataque contra la AMIA. Sin embargo, la mandataria no hizo alusiones al asunto durante la jornada.