Por Marcelo Arancibia
Partido GEN - San Juan
Una de las características más destacable del periodo giojista es el alto nivel de disciplinamiento social a la figura del gobernador y su política extractivista. Una mayoría considerable de la sociedad tiene una obediencia acrítica al poder y responde de una forma automática a los valores que se le proyectan desde las esferas del poder político y económico.
El giojismo logra el disciplinamiento desde una prédica "Neo-Liberal", entendido éste no como una corriente ideológica o una ética pública, sino como una estructura construida para garantizar el poder político y económico de las corporaciones que gobiernan por encima de los poderes democráticos. En San Juan, la relación entre el poder político [Gioja] y el poder económico [Barrick Gold entre otras corporaciones extranjeras extractivistas] es de articulación de favores e intereses complementarios, entre quien garantiza una institucionalización para el saqueo y quien genera oportunidades de negocios para una elite burocrática, empresarial, gremial, comunicacional y religiosa [el llamado consenso Mega-Minero].
Esa transacción entre el poder político y el económico ha desembocado en una política como arte, no de lo posible, sino para traicionar intereses reales y legítimos del Estado y sus ciudadanos, entre ellos, la de los propios trabajadores mineros, a través de la construcción de otros intereses, imaginarios e injustos. En esa relación transaccional, es el poder político el que termina por disciplinarse al poder económico. El disciplinamiento es tal que el poder político Auto-Boicotea su propia subsistencia en el poder. Ha perdido el sentido de la Auto-Conservación. esde enero a octubre del año que finaliza por el cierre de Pascua-Lama se generaron unos 8.000 despidos. El Gobierno y los gremios vinculados a la actividad defenestraron públicamente a la UOCRA por denunciar la destrucción de empleos en sus sector, y anunciar una posible declaración de "alerta y movilización" para enero del 2014.
El Consenso Mega-Minero considera que un eventual paro y movilización de los trabajadores mineros constituye un ataque a la provincia, en realidad ocultan que el ateque es a ellos mismos.
Una Juez del Fuero Laboral falló para que los Poderes Legislativo y Ejecutivo, respectivamente, legisle y reglamente el art. 14 bis de la Constitución Nacional, para que los trabajadores de Veladero participen en las ganancias de Barrick Gold. El Consenso Mega-Minero acusa a la Magistrada de obrar por despecho, por no haber sido ascendida a Camarista Laboral; mientras tanto, ningún legislador de la oposición [¿oposición?] o de extracción sindical ha tomado el guante en defensa de la Constitución y de los Trabajadores. Existen denuncias de empleados de empresas de servicios mineros de haber sido inducidos, con la complicidad de la Subsecretaría de Trabajo, a renunciar a sus puestos de trabajo [sin percibir indemnización por despido] bajo la promesa de una pronta re contratación, una vez que Pascua-Lama retome su faena.
El Gobierno sabe que Pascua-Lama no retomará su construcción, y si lo hace, lo será en un plazo que ningún trabajador pueda alimentariamente esperar.
A pesar de los despidos y de las políticas Pro-Patronales y Anti-Obreras, el disciplinamiento social a Gioja y al extractivismo se expresa al conservar el giojismo su caudal electoral en las elecciones de medio término [55 %] y en la inmovilización de los propios trabajadores en defensa de sus puestos de trabajo, desbordando a la burocracia sindical.
Sin embargo, el Gobierno y los representante gremiales debieran saber que no se puede estar en dos bandos en lucha a la vez o pretender no estar en ninguno de los dos.
En un punto de la historia, las elecciones se pierden por las contradicciones, las males gestiones y las traiciones. El disciplinamiento social ha convertido a San Juan en un panóptico [prisión imaginada por el filósofo J. Bentham en 1791, donde el vigilante desde una torre puede observar a todos los prisioneros, sin que éstos puedan saber si están siendo observados o no] donde la crisis económica y la tragedia del Gobernador en la campaña electoral, le han hechos perder sus dos torres de vigilancia, a José Luis Gioja y a la Barrick Gold.
Los sanjuaninos terminamos el año disciplinados, pero sin las dos factores disciplinantes. Llenar el vacío político y económico puede convertirse en una oportunidad, de sustituir la democracia delegativa y autoritaria de Gioja, por una democracia Institucional y plural; y cambiar al Neo-Liberalismo extractivista, por un sistema productivo basado en la investigación y el desarrollo de nuevas tecnologías no vinculadas a la destrucción del territorio y el ambiente, que genere una riqueza que se distribuya en el mayor número, no a unos pocos.